El siete manchego prácticamente deja sentenciada la eliminatoria de Copa del Rey al ganar en el Palacio al Bada Huesca
25-Bada Huesca: Jorge Gómez (p), Camas (2), Mota (2), Rodrigo Benites (1), Mira (1), Pinto (3), y Adrià Pérez. Siete inicial. Dani Arguillas (ps), Carmona (4), Val (1), Montoya, Tioumentsev (4), Oier (2), Sergio (3), Asier (2) y Del Valle.
30-BM Cuenca: Samuel (p,1), Marrochi (4), Doldán, Lindbland, Thiago Alves (2), Fakete (1) y López (1). Siete inicial. Maciel (ps), Natán (4), López Ortega (1), Moscariello (5), Eskerici (3) y Dutra (8).
Parciales cada cinco minutos: 2-3, 4-5, 6-7, 8-9, 8-12, 10-15 (descanso) 12-18, 12-18, 14-22, 18-24, 20-25 y 25-30.
Árbitros: Luque y pascual. Excluidos Mira, Rodrigo Benites, Joao Pinto y Del Valle por el Bada Huesca; Moscariello, Marrochi, Eskerici y López (roja) por el BM Cuenca.
El Bada Huesca se despide de la Copa del Rey salvo milagro este domingo en Cuenca. Los manchegos han sido superiores. Han dominado en defensa y en ataque. Y eso que perdieron por roja directa en el minuto 18 a Sergio López por trabar de malas maneras a Quique Camas cuando encaraba la portería y seis minutos antes a Fakete al lesionarse en una rodilla al bloquear a Montoya en el centro del 6:0. Por si fuera poco, Cuenca llegó con lo justo al Palacio. Maciel, un seguro bajo palos, se cambió, pero no jugó al estar lesionado en una mano y el portentoso extremo derecho Vainstein ni viajó.
Cuenca ha firmado un partido para que la vuelta sea un trámite. levantar esa diferencia de cinco tantos se antoja imposible. Los manchegos no solo fueron superiores es que hasta la suerte fue esquiva con el siete altoaragonés. Cinco palos en el primer acto, tres en la misma jugada de ataque. Si la pretemporada dle siete de Nolasco despertó con un rayo de esperanza con el empate contra Granollers y la victoria en casa del Billere, el regreso a la realidad ha sido como chocar contra una pared de granito. Ha sido un regreso a la casilla de salida con un punto de similituid a lo visto en la primera vuelta. Que Joao Pinto y Tioumentsev tienen que ser parte de la medicina de la recuperación está claro, pero la realidad es que el enfermo sigue en la UVI.
Cuenca aplicó la lógica del balonmano. Buena portería con defensa como un muro y acierto en ataque. Parece sencillo, pero es complicado. Al Bada le ha faltado defensa y portería y ha asfaltado el camino para que Samuel, el portero hoy de Cuenca, se erigiera en figura. Ha parado hasta lo que parecía imposible. Y así es muy difícil ganar.
Cuenca ha demostrado que, además, de equipo tiene individualidades. Que sea uno de los mejores equipos de esta Asobal no es casualidad. Atrás monta un 6:0 de acero puro. Encontrar un hueco es tarea de titanes. Se cierran, te tocan, te desestabilizan y han obligado a lanzamientos incómodos. Y cuando no lo eran, se fallaron muchos, demasiados.
Con ese juego ha ido horadando diferencias en el electrónico poco a poco. Primero diferencias de 2 sin que se viera a los de Nolasco muy capaces de voltear el marcador. Ha logrado un par de igualadas a 4 tantos y a 6. Y entonces ha aparecido un tipo como Dutra para meter la directa. Ha llegado a dominar 8-13 con minutos para acabar el primer acto y la diferencia de +5 al descanso ya reflejaba la diferencia sobre el 40×20.
El segundo acto ha seguido por los mismos derroteros. Cuencca ha llegado a manejar diferencias de más 9 (12-21) que obligaron a Nolasco a parar el reloj. Puestos a perder, al menos ofrecer la mejor cara posible. La impresión es que los minutos eran como una losa para un Bada Huesca al que se le hacía muy largo. Sí, Tioumentsev ha dejado un par de goles y de destellos positivos, sí ha habido algo de rasmia para dulcificar la derrota, pero las dudas se mantienen. Lo mejor es que queda toda una segunda vuelta para buscar la permanencia de la Asobal, que es lo que importa. La Copa era una ilusión, habrá que pensar en la Asobal. Que no todos los equipos son Cuenca.