La falta de acierto y la escasez de rotaciones factores determinantes para esta nueva derrota del Peñas ante el filial del Gran Canaria.

No ha podido encadenar su tercer partido consecutivo Lobe Huesca al abrigo de su afición y en la mañana de hoy sábado ha caído derrotado a manos de un Gran Canaria por 64-73. La falta de acierto en los momentos clave, unido a la falta de profundidad de banquillo han sido determinantes para esta nueva derrota peñista. A pesar de lo inusual del horario, 12.00, la afición respondió con creces a la llamada con más de un millar de espectadores en la grada. El preparador oscense dispuso de su clásico quinteto de entrada: García, Adom, Yarnoz, Lafu y N’ Guessan.

Lobe Huesca comenzó el encuentro excesivamente frío, sin ritmo, con ataques largos pero sin ver canasta. Un parcial de 0-6 para los insulares adormecía más si cabe a los peñistas. Los problemas en la mesa obligaban a parar el partido durante varios minutos y dió un respiro a los oscenses que empezaban a encontrar a N’ Guessan bajos los aros (9-10). Los primeros cambios de Cerdán provocaban efectos contradictorios, De Celis puso una velocidad más al encuentro y anotó dos triples en sendas jugadas para dar las primeras rentas peñistas (15-12). Kasanzi y Gerard Rodríguez estuvieron muy desdibujados y el técnico de inmediato los devolvió al banquillo. Los canarios impusieron su ley bajo los aros y el choque se igualaba terminando el cuarto con empate a 17.

Un nuevo parcial de 0-5 de entrada para los forasteros obligó a ir a remolque desde el inicio a los peñistas. Los oscenses apretaban en defensa y tras una bonita puerta atrás de Luis García y un triple de Yarnoz devolvían la ventaja a los locales (26-24). El partido discurría con ataques fulgurantes y rápidas transiciones. Ambos equipos veían aro con asiduidad. Dos canastas de N’ Guessan y Adom con 2+1 unido a una postrera canasta de Lafuente devolvió el equilibrio al electrónico (37-37).

Como casi siempre la vuelta de los vestuarios no traen buenos minutos de baloncesto. Nuevamente el desorden, la falta de acierto se apoderó de la cancha. Ruben de Celis siguió a lo suyo, haciendo daño desde el perímetro. El ilerdense disfrutaba de sus mejores minutos con la verdiblanca anotando 5 triples. Los pupilos de Gabriel Alonso trataban de distanciarse en el marcador a base de aciertos desde la media y larga distancia pero Lobe reaccionó con celeridad situándose a tan solo dos puntos de desventaja (51-53).

Lobe empezaba acusar la falta de rotaciones en el principio del definitivo cuarto. El cansancio hacia mella en el rostro de los jugadores. Stosic y N’ Guessan se alternaban en el interior, García y De Celis compartían la dirección y el exterior se centraba en las manos de Yarnoz, Adom y Lafuente. Pocos mimbres para luchar cuerpo a cuerpo ante un Canarias más equilibrado y compacto. El base visitante Duscak tomó el mando de las operaciones y puso un ritmo eléctrico que axfisió a los locales.
Las decisiones polémicas arbitrales no ayudaban a los locales y desquiciaron aún si cabe mas a los jugadores sobre el parquet. El último esfuerzo de N’ Guessan por reducir diferencias no fue suficiente y los canarios se llevaron el triunfo por 64-73.

Rafael Pérez