El Club Ciclista Oscense recibió ayer la Parilla de Oro 2022, máxima distinción otorgada por el consistorio oscense y que llega en una temporada en la que el Gran Premio San Lorenzo -organizado por el Club- podrá, por fin, celebrar su sexagésimo novena edición.

Acompañado en el escenario por algunos antecesores en el cargo, Miguel Bergua, presidente del Club Ciclista Oscense, recibió de manos de Luis Felipe, alcalde de Huesca, una Parrilla de Oro dedicada a todos aquellos implicados en la trayectoria del club, el más longevo de la ciudad de Huesca dentro del ciclismo y con mayor actividad en Aragón.

La entrega de la Parrilla tuvo lugar en el Palacio de Congresos, en un acto previo a las Fiestas de San Lorenzo y para la ocasión se reunieron miembros de las distintas formaciones y secciones del Club.

Desde los más pequeños de las escuelas de Vive Asesores Inmobiliarios hasta los socios más longevos, pasando por los sub23, juveniles o triatletas que pudieron disfrutar de un repaso de la historia de una ciudad ligada al ciclopedal. A ellos iba también dedicado el premio, a los que siguen “luchando día a día”, tal y como reconocía Bergua, así como un incentivo para seguir trabajando en el futuro de la bicicleta en Huesca y provincia.

De esta manera, el próximo 15 de agosto, las calles de Huesca volverán a disfrutar del pelotón nacional en una prueba asentada en el calendario y que ha visto pasar a numerosos corredores que más tarde han sido o son a día de hoy profesionales.

Será desde las 11 de la mañana en el ya clásico circuito urbano que cuenta con salida y meta en la Avenida Monreal y permitirá al público disfrutar del paso de los ciclistas durante sus más de 80 kilómetros y dos horas de duración.