EL BADA HUESCA GANA Y SE GUSTA |

El Bada Huesca acaba de cortar una racha de tres temporadas sin ganar al Anaitasuna en el Palacio.

28-Bada Huesca: Tercariol (p), Adrià Pérez (1), Mosquera (7), Rodrigo Benites (2), Gucek (2), Miguel Malo (6), Ian Moya. Siete inicial. Arguillas (ps), Dijà (6), Óscar(2), Frank Cordiés (1), Ignacio Suárez (), Danylo, Floris (1), ‘Charly’, Samuel Alejandro.

23-Anaitasuna: Bar (p), Ganuza (2), Bazán (3), Edu Fernández (3), Bonanno, Aitor García (4), Torriko (6). Siete inicial. Martínez (ps), Gastón (1), Martinovic, Xavier González, Redondo (2), Arzoz (1), Albizu (1), Kisselev, Itoiz, Adrián Ortiz.

Parciales cada cinco minutos: 2-3, 5-3, 8-5, 11-7, 13-8, 15-10 (descanso) 17-10, 18-12, 21-15, 23-17, 24-21, 28-23

Árbitros: Rosendo-Friera. Excluido Bonanno por Anaitasuna.

Por fin, los de Nolasco se dieron un homenaje contra los de Pamplona. Eso sí, sufrido. Quizá un poco menos de lo esperado en un duelo que siempre tiene tintes de derbi pese a que sean los dos mejores equipos de balonmano de dos comunidades autónomas distintas.

Se esperaba un festival de goles. Sobre todo, si uno tira de los últimos encuentros entre Bada y Anaitasuna. Y hubo goles en un encuentro donde las defensas empezaron imponiéndose. Si alguien quería garra, lo mejor era darse una vuelta por el Palacio. Ambos plantearon defensas 6:0 aunque los altoaragoneses la camuflaban en ocasiones con Malo o Ian Moya en el adelantado. En el 5-3 que firmó Mosquera con la redonda entrando llorando, Bar se dio con el poste y tuvo que ser atendido. Uno de esos golpes que descoyunta a cualquiera, menos a un jugador de balonmano. Ya se sabe que son de otra pasta. Aún así salió Martínez.

Terçariol salió desde el primer momento a frenar a los navarros. Eso permitió meter el 6-3, obra de Mosquera. Parecía que la derrota contra el Naca había servido de medicina para los altoaragoneses. Como si no fueran los mismos equipos. Y el brasileño frenó un 7 metros para habilitar el 7-3 con Malo de ejecutor desde los 7 metros y 11 minutos jugados.

Con 8-3, Anaita paró el reloj. Estaba claro que tenía que replantear las cosas ante un Bada que se gustaba en defensa y en ataque reflejado en un parcial de 6-0. Y los navarros le sacaron partido para ponerse a 2 (8-6). El partido estaba en otro momento. Anaita empezó a correr, a subir su intensidad defensiva y Bada se espesó hasta que encontró de nuevo el pegamento a su juego que le permitió mantener diferencias de +3 y +4.

Uno de los problemas del siete altoaragonés llegó en una defensa de la que salió perjudicado el brazo derecho de ‘Charly’ al que esta temporada le persiguen las lesiones. Nolasco puso a Samuel Alejandro en el extremo izquierdo para dar un respiro a Adrià y a Ian -qué campaña lleva- en el otro lado. Lo mejor del Bada era que en el apuro salía alguien al rescate; se llame Dijà u Oscar y siempre Terçariol. Y en defensa, qué decir del señor Gucek o de Rodrigo Benites.

Volvió Bar a la portería de Anaita e Ignacio paró una contra a la carrera. El segundo acto comenzaba bien para la tropa de Nolasco. Si el brasileño echaba la persiana su defensa metía cemento para atascar el ataque de Anaite. Arriba, Benites sacaba dos 7 metros consecutivos y Malo metía uno para poner el 17-10 en el electrónico sin llegar al minuto 35. Anaita decidió atacar con 7 y no le sacó el partido esperado.

El partido se vistió con las prisas de los navarros y el control de los aragoneses. Los navarros empezaron a traccionar mejor. Sobre todo en defensa. Bar sacó un par de redondas y eso ayudó a creer en la remontada. La ventaja se redujo a 4 y Gucek firmó dos contras para abrillantar aún más el partido que estaba realizando.

Con el partido controlado, Nolasco puso a Danylo sobre la pista para que se fogueara ante los Bonanno, Edu Fernández y Aitor García. Con 24-19 y 6 minutos para el final, Nolasco paró el reloj. La victoria estaba más encarrilada, pero ya se sabe que firmarla antes de tiempo siempre una temeridad. Y de hecho, Anaita se puso a 3 a 3 minutos del final. Toquecito de atención y vuelta al 40×20 para acabar una racha de tres temporadas sin ganar en casa al Anaita. El derbi se quedó en Huesca.